Artículo destacado:

  • Las inundaciones son la catástrofe natural más frecuente y destructiva que afecta a los viajeros: el 90% de las catástrofes estadounidenses y el 40% de las asiáticas se deben a inundaciones, lo que subraya la urgente necesidad de concienciación y preparación.
  • A pesar de los crecientes riesgos y de las recientes inundaciones catastróficas en India, Pakistán y Estados Unidos, la mayoría de los viajeros siguen despreocupados, lo que pone de manifiesto la brecha existente entre la percepción y la realidad, ya que las condiciones meteorológicas extremas perturban cada vez más los viajes por todo el mundo.
  • Global Rescue proporciona ayuda de emergencia y evacuaciones críticas en tiempo real durante inundaciones y otras catástrofes naturales, ofreciendo una asistencia inmediata que los seguros tradicionales no pueden ofrecer, garantizando la seguridad de los viajeros en todo el mundo.

 

 

De todas las catástrofes naturales que afectan a los viajeros, las inundaciones son las más frecuentes y a menudo las más devastadoras. En EE.UU., las autoridades informan de que el 90% de las catástrofes naturales son inundaciones, mientras que en Asia las inundaciones representan casi el 40% de todas las catástrofes. Estas asombrosas cifras revelan la magnitud del peligro y la importancia de la concienciación sobre las inundaciones para los viajeros internacionales.

Las vacaciones y los viajes internacionales prometían cultura, gastronomía y aventuras sin preocupaciones. En la actualidad, suelen ir acompañados de advertencias, ya que las amenazas mundiales, desde huracanes y tifones hasta inundaciones, modifican la mentalidad de los viajeros en materia de seguridad. Los niveles de comodidad dependen ahora del conocimiento de los riesgos y de la capacidad de respuesta.

La Encuesta Mundial de Primavera 2025 sobre Sentimiento y Seguridad de los Viajeros de Rescate reveló que a más de la mitad de los viajeros no les preocupa mucho que las catástrofes naturales interrumpan sus planes, a pesar de las previsiones de hasta cinco grandes huracanes en la temporada atlántica de 2025 y del aumento de informes sobre interrupciones relacionadas con la meteorología.

«Los viajeros siguen adelante con sus planes a pesar de los riesgos de las catástrofes naturales. Esto es un testimonio de la resistencia del sector de los viajes», declaró Dan Richards, Director General de The Global Rescue Companies. Señaló que incluso entre los viajeros que expresan poca preocupación, muchos ya han experimentado las consecuencias reales de incendios forestales, inundaciones o huracanes, desviando o retrasando sus viajes.

Casi el 40% de los encuestados declararon haber sufrido alguna interrupción de sus viajes debido a condiciones meteorológicas extremas. Aun así, el 52% afirmó estar «poco» o «nada» preocupado por futuras interrupciones. «El riesgo es ahora una parte permanente del paisaje de los viajes», dijo. «La solución no es dejar de viajar, sino viajar de forma más inteligente. Eso significa conocer las condiciones ambientales locales, vigilar los avisos de los gobiernos y disponer de sistemas de apoyo en caso de emergencia.»

El año 2025 puso de manifiesto esta realidad con una serie de inundaciones catastróficas que asolaron todos los continentes. India, Pakistán y Estados Unidos sufrieron inundaciones mortales que desplazaron comunidades, dejaron varados a visitantes y causaron daños por valor de miles de millones de dólares. Combinadas con el poder destructivo de huracanes y tifones, que provocan mareas de tempestad y lluvias torrenciales, las inundaciones se han convertido en el riesgo de catástrofe natural más acuciante en los viajes modernos.

 

Las inundaciones más destacadas de 2025

La temporada de monzones de verano de 2025 resultó especialmente mortífera. En estados septentrionales como Himachal Pradesh y Uttarakhand, las lluvias incesantes provocaron inundaciones repentinas que arrasaron carreteras, puentes y pueblos enteros. Ciudades turísticas tan populares como Manali quedaron incomunicadas durante días, lo que obligó a lugareños y viajeros a buscar terrenos más elevados. Los senderistas del Himalaya se quedaron varados sin posibilidad de acceder a atención médica o transporte, lo que pone de manifiesto la vulnerabilidad de los viajeros cuando las inundaciones azotan regiones remotas.

Pakistán sufrió un destino similar cuando las fuertes lluvias devastaron Sindh y Punjab. Karachi, uno de los centros internacionales más activos del país, vio cómo barrios enteros quedaban sumergidos. Los desbordados sistemas de drenaje de la ciudad fallaron, los aeropuertos quedaron interrumpidos y los hoteles de las zonas bajas se vieron obligados a evacuar. Para los visitantes, simplemente encontrar un refugio seguro se convirtió en un reto de enormes proporciones.

En Estados Unidos, las fuertes tormentas provocaron inundaciones récord a lo largo de los ríos Misisipi y Misuri. Ciudades del Medio Oeste como St. Louis y Davenport se llevaron la peor parte, mientras que inundaciones repentinas arrasaron Nevada y Arizona, sorprendiendo a turistas en campamentos desérticos y rutas de senderismo. Estos sucesos sirvieron para recordar que las inundaciones no se limitan a las costas o a los cinturones de monzones, sino que pueden aparecer de repente en lugares inesperados.

 

Por qué las inundaciones y las mareas tormentosas son tan peligrosas para los viajeros

Las crecidas presentan múltiples peligros que los viajeros suelen subestimar. Sólo 15 centímetros de agua a gran velocidad pueden derribar a un adulto, mientras que 30 centímetros pueden arrastrar un coche. Más allá de este peligro físico inmediato, las aguas de las inundaciones suelen ser portadoras de contaminación que propaga enfermedades como el cólera, la disentería y otras infecciones. Para los turistas poco familiarizados con el terreno y las infraestructuras locales, los riesgos se multiplican cuando las carreteras se derrumban, los aeropuertos cierran y los puentes son arrasados por las aguas.

Las urgencias médicas son otra preocupación importante. Las lesiones provocadas por los escombros, los huesos rotos y las heridas no tratadas pueden agravarse rápidamente cuando los hospitales son inaccesibles. En algunas regiones, las inundaciones también crean riesgos de seguridad, provocando saqueos o disturbios que ponen a los viajeros en peligro adicional.

 

Huracanes, tifones y sus efectos en las inundaciones

Los huracanes en el Atlántico y los tifones en el Pacífico son poderosas tormentas que traen vientos de más de 74 mph. Pero lo más peligroso no suelen ser los vientos, sino las mareas de tempestad. Ciudades costeras enteras pueden quedar sumergidas en cuestión de horas, obligando a evacuaciones masivas y dejando varados a los visitantes.

«La tecnología de seguimiento meteorológico permite a la gente seguir la trayectoria de los huracanes mucho antes de que toquen tierra, lo que les da tiempo para preparar sus casas y evacuarlas», afirma Richards. «Sin embargo, todos los años hay quien se queda quieto, enfrentándose a la tormenta de frente, bien porque no quiere o no puede hacer otra cosa».

En 2025, los huracanes a lo largo del Golfo de México y los tifones a lo largo del Sudeste Asiático desencadenaron una destrucción generalizada. En ambos casos, las inundaciones fueron la causa principal de los daños. Los aeropuertos cerraron, las infraestructuras locales fallaron y los viajeros internacionales quedaron aislados con opciones limitadas de evacuación. Estos sucesos pusieron de manifiesto que los huracanes y los tifones, aunque predecibles en su estacionalidad, siguen dejando a los turistas expuestos a inundaciones repentinas y al caos logístico.

 

Preparativos de viaje en regiones propensas a las inundaciones

Para los viajeros que visitan destinos donde son frecuentes las inundaciones, los huracanes o los tifones, la preparación es crucial. Investigar la temporada de inundaciones o tormentas en su destino debe ser el primer paso en la planificación de cualquier viaje. Muchos países publican avisos durante las temporadas de monzones o huracanes, y los viajeros que se mantienen informados pueden tomar decisiones más seguras.

Proteger los documentos esenciales también es vital. Los pasaportes, visados y documentos de identidad deben guardarse en recipientes impermeables o bolsas de plástico selladas para garantizar que puedan utilizarse aunque el equipaje esté empapado. Empacar una «bolsa de viaje» ligera con agua embotellada, cargadores portátiles, un botiquín básico de primeros auxilios y mapas locales también puede salvar vidas en caso de que sea necesaria una evacuación.

Conocer las rutas de evacuación es igualmente importante. Identificar terrenos más elevados y refugios de emergencia cercanos antes de una catástrofe garantiza que los viajeros no se queden sin saber cuándo la situación se vuelve crítica. Por último, mantenerse conectado a las noticias locales y a los avisos meteorológicos, ya sea a través de aplicaciones móviles o radios, puede proporcionar advertencias cruciales antes de que lleguen las inundaciones o las mareas de tormenta.

 

Cómo Global Rescue protege a los viajeros durante inundaciones y catástrofes naturales

Aunque la preparación es esencial, las inundaciones y los desastres relacionados con tormentas suelen desbordar incluso los planes más cuidadosamente trazados. Los seguros de viaje tradicionales suelen ofrecer reembolsos a posteriori, pero los retrasos, los formularios de reclamación y la cobertura limitada proporcionan poca ayuda en medio de una emergencia. Global Rescue, en cambio, ofrece una actuación inmediata.

Cuando una inundación o un huracán hacen que un lugar sea inseguro, los equipos de operaciones de seguridad de Global Rescue pueden extraer a los miembros y ponerlos a salvo u organizar vuelos de vuelta a casa. En el caso de viajeros heridos o varados en zonas remotas e inundadas, los equipos de rescate sobre el terreno de Global Rescue, formados por fuerzas especiales y paramédicos militares veteranos, pueden llegar a zonas siniestradas donde el personal de emergencia local no puede hacerlo.

Un ejemplo reciente demuestra el impacto de estos servicios. Un miembro de Global Rescue que utilizaba un dispositivo SOS por satélite informó de que se encontraba atrapado en el techo de su vehículo después de que éste hubiera sido arrastrado fuera de la carretera y quedara medio sumergido en las aguas de la riada. Global Rescue alertó inmediatamente a la Autoridad Australiana de Seguridad Marítima (AMSA), que se coordinó con la policía para llegar al lugar de los hechos. Poco después se confirmó que la persona había sido rescatada y puesta a salvo. Sin una rápida coordinación e intervención, el resultado podría haber sido mucho peor.

Cuando los hospitales son inaccesibles, los miembros de Global Rescue pueden consultar con médicos, enfermeros y paramédicos a través de servicios de telesalud, recibiendo asesoramiento médico urgente estén donde estén. Los servicios de inteligencia y asesoramiento en tiempo real ofrecen a los miembros la posibilidad de controlar el nivel de las inundaciones, localizar refugios de emergencia y recibir instrucciones sobre las rutas de evacuación.

A diferencia de las pólizas de seguro que requieren papeleo y reembolsos, la afiliación a Global Rescue elimina por completo los formularios de reclamación. Los gastos de extracción, evacuación y rescate están totalmente cubiertos, lo que da a los viajeros la confianza de que la ayuda será inmediata y directa.

 

La Conexión Global de Rescate

Las inundaciones de 2025 han puesto de manifiesto la creciente fragilidad de las infraestructuras frente a las catástrofes naturales. Ya sea en el Himalaya indio, en las ciudades de Pakistán o en los valles fluviales de Estados Unidos, los viajeros ya no pueden dar por sentado que los sistemas modernos resistirán las condiciones meteorológicas extremas. Los huracanes y tifones agravan este riesgo al provocar lluvias torrenciales que provocan inundaciones catastróficas.

Los viajeros deben responsabilizarse personalmente de su seguridad protegiendo sus documentos, llevando suministros de emergencia y manteniéndose informados sobre el tiempo en la región. Pero incluso con estas precauciones, las inundaciones y otras catástrofes naturales pueden dejar a los visitantes varados, heridos o sin ayuda.

La afiliación a Global Rescue cubre ese vacío, ofreciendo protección en todo el mundo, asistencia experta 24 horas al día, 7 días a la semana y evacuación garantizada sin reclamaciones ni gastos ocultos. Global Rescue ofrece una red de seguridad a todos aquellos que viajan al extranjero, ya sea para hacer senderismo por montañas expuestas a inundaciones, pasar las vacaciones en las costas de huracanes o trabajar en ciudades expuestas a tifones.