Los viajeros que se dirigen a Zambia este otoño han expresado su preocupación por un brote local de carbunco bacteridiano que ha provocado más de 120 casos sospechosos en humanos. El origen del brote, según el Ministerio de Sanidad del país, es una población de hipopótamos enfermos en el río Luangwa, donde han muerto 62 animales.

«Los viajeros deben evitar cualquier contacto con animales enfermos o muertos», aconsejó el Dr. Phil Seidenberg, Director Médico Regional para África de Global Rescue, con sede en Lusaka. «En particular, deben evitar los hipopótamos en los ríos, y evitar comer su carne».

Los signos de la enfermedad incluyen lesiones cutáneas, que suelen empezar como cualquier picadura pero que progresan a tamaños mayores y acaban ulcerándose. 

Además del cuidado adecuado de la herida, el Dr. Seidenberg continuó: «La doxiciclina o la ciprofloxacina son el tratamiento de elección. Si hay dudas o incluso antecedentes de una posible exposición al carbunco, es mejor prevenir que curar y presentarse en la clínica más cercana e iniciar un tratamiento con doxiciclina».

«Por cierto, es posible que muchos viajeros a Zambia ya lo estén tomando para la profilaxis de la malaria. Para el ántrax, se aumentaría la dosis».

Una alerta aparecida esta semana en Hunting Report, publicación que cubre la caza en toda África y en el mundo, afirmaba que «el brote se detectó por primera vez a principios de septiembre y, al parecer, se cerraron las zonas infectadas. Según fuentes de la comunidad de cazadores, las zonas infectadas en Chama estaban fuera de las zonas de caza y las mortalidades en el Bajo Zambeze no se confirmaron oficialmente como casos de carbunco.»

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades afir man que no se tiene constancia de que el carbunco se propague de una persona a otra, pero advierten de que «los seres humanos pueden infectarse con carbunco al manipular productos procedentes de animales infectados o al inhalar esporas de carbunco procedentes de productos animales infectados (como la lana, por ejemplo). Las personas también pueden infectarse con carbunco gastrointestinal al comer carne poco cocinada de animales infectados.»

No es infrecuente ver brotes de carbunco en determinadas zonas rurales durante una temporada de sequía. En septiembre, Bloomberg News informó de que el Ministerio de Sanidad italiano identificó un brote de carbunco en el ganado justo al sur de Nápoles que ha matado al menos a 19 reses y ovejas.